Una oleada de asociacionismo se ha extendido entre los profesionales de la imagen. Se unen para buscar nuevos espacios para mostrar su obra, crear proyectos poco convencionales y, sobre todo, para reivindicar el valor de la fotografía documental. Esta semana los principales colectivos participan en Tràfic, un evento consagrado a este género.
Ha sido un fenómeno silencioso pero implacable. Desde que en 2003 apareciera la primera asociación de fotógrafos en Barcelona, no han dejado de surgir colectivos, asociaciones y fundaciones privadas que, desde posicionamientos distintos, parecen reclamar lo mismo: nuevos espacios para una fotografía documental donde, tenga o no una finalidad comercial, su autor se posicione frente a lo retratado y aporte un punto de vista singular. (más…)